la palabra dios se desdibuja
y deja unas líneas desprolijas
luego varios puntos
luego nada,
la palabra naranja
me llena la boca de saliva
y las ganas de morder una naranja
que queda en la heladera,
la palabra tiempo
no significa nada
queda a cargo de los otros
no termina nunca de llegar,
la palabra mujer
tiene ojos de azúcar moreno
camina como si el mundo tuviera futuro
y es como debería
ser la humanidad,
la palabra agua
duerme bajo siete llaves
hasta que venga
el héroe del cuento a liberarla,
la palabra poema
late sin darse por vencida
aunque a veces
la desligue de la poesía,
la palabra alegría
vuela por el salón
salta a la cama
y se parece bastante
a la palabra lucidez,
la palabra bondad
es sinónimo preciso
de la inteligencia,
las palabras futuro
es femenina
y es masculina
respiran con vigor
explican todo
y duermen a doce pasos de donde escribo.